Ha llegado la hora de manifestarse por el Mountain Bike
Muchos sois conocedores de las trabas que en los últimos años nos están poniendo desde diferentes administraciones para montar en bicicleta. También conocéis el absurdo margen de tiempo (3 días antes de una prueba o marcha) con que la Comunidad de Madrid (Medio Ambiente) comunica a los organizadores la denegación de permisos para celebrarla, sin tiempo material para cambiar recorridos, y los graves perjuicios económicos que acarrean.
Según el borrador del PRUG (Plan de Regulación de Uso y Gestión) del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, al que hemos tenido acceso, la Comunidad de Madrid pretende prohibir la circulación de mtb en caminos de menos de 3 metros de anchura. ¿Por qué? Nadie lo sabe y menos cuando contradice el PORN (Plan de Ordenación de Recursos Naturales), que es la norma que actualmente rige en el parque. Según el art. 4.4.8.17 de esta norma, se permite la circulación en mtb por senderos, viales y caminos de uso tradicional.
¿Por qué una regulación más restrictiva a partir de ahora? ¿Contradicción? ¿Cesión a las presiones de ciertos colectivos? Desde nuestro punto de vista, ambas cosas.
Es fundamental que el colectivo ciclista se haga oír en los despachos de la Comunidad de Madrid.
Ya es hora de que nos unamos para que tomen conciencia del enorme número de practicantes y usuarios de la bicicleta de montaña en la zona centro.
Os pedimos que firméis el manifiesto que figura a continuación y que lo presentéis en el Registro de cualquier dependencia pública (ventanilla única), en vuestro Ayuntamiento o en cualquier registro de la Administración, para que se remita a la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid.
Os lo escanearán (es gratis) y os pondrán una etiqueta que acredita día y hora de la presentación. Guardadlo.
Divulgad este manifiesto y compartidlo con todas las personas que podáis. Nuestro futuro como ciclistas de montaña en la zona centro está en juego.
Quieren un Parque Nacional para que los ciudadanos lo veamos en una vitrina, pero que lo paguemos todos para que lo disfruten sólo unos pocos.
¡No podemos permitirlo!